¿Cuándo se debe comenzar la higiene bucal?

Cuándo Se Debe Comenzar La Higiene Bucal

Se suele pensar popularmente que la limpieza de la boca debe iniciarse con la salida de los primeros dientes, o en el momento en que un niño empieza a comer sólidos, sin embargo, esto no es así, y ese es el tema del que hablaremos hoy.

Hay múltiples razones para comenzar la higiene bucal desde el nacimiento del bebé, una de ellas es la formación suave, gradual y progresiva de un hábito positivo que nos va a beneficiar toda la vida. Imagina por un momento que nunca te han introducido un objeto (en este caso un cepillo) en la boca, que eres un bebé o un niño, y que un buen día vas al odontólogo y le dicen a tu mamá que tienes caries y que de ahora en adelante, mamá deberá cepillarte los dientes tres veces al día -además de llevar a cabo un tratamiento que consta de procedimientos incómodos y en algunos casos, dolorosos-. Sería muy molesto, ¿no crees? Sería, de hecho, un shock y lo más probable es que las sesiones de cepillado, incluyan lágrimas.

Como eso no es lo que queremos para nuestros niños -ni ir al odontólogo tan tarde como para ya tener caries, una enfermedad que puede prevenirse teniendo la información adecuada, ni empezar el cepillado de golpe- vamos a hacerlo de forma gradual.

Cuando nace el bebé, empezamos limpiándole el interior de la boca con una gasa de algodón limpia, embebida en agua potable, sólo un suave masaje que dura menos de un minuto y puede hacerse a la hora del baño. Si limpiamos todo el cuerpo, los dedos, las orejas, los párpados, ¿cómo no vamos a limpiarle la boquita a un bebé?

Después, hacemos la transición a un dedal de silicona, cuando empiezan a hacer erupción los primeros dientes y posteriormente al cepillo de dientes infantil y a la pasta y seda dental. De esta manera se hacen cambios progresivos y el peque no sólo está acostumbrado a que se le limpie la boca tres veces al día desde el nacimiento sino que podrá mantener una adecuada higiene y salud bucal.

Para más tips sobre cómo hacer el cepillado infantil ameno y libre de llanto, lee mi artículo anterior, publicado aquí.